La incesante subida de la luz, cuyo precio ha rebasado máximos históricos en los últimos meses, ha disparado la demanda de instalaciones solares de autoconsumo.
Prueba de ello es que, según estimaciones de la Unión Española Fotovoltaica (Unef), un 68% de los hogares españoles valoran pasarse al autoconsumo desde el pasado mes de junio. Una decisión que, aunque supone una primera inversión inicial, garantiza un importante ahorro energético y económico a largo plazo. De hecho, en el 2020 se instalaron 596 MW de nueva potencia fotovoltaica en instalaciones de autoconsumo en España, casi un 30% más que en 2019, y las cifras pueden duplicarse en este 2021.
Además, el Gobierno español aprobó el pasado verano una partida de 660 millones de euros, ampliables a 1.320, que se destinarán a instalaciones de autoconsumo, almacenamiento detrás del contador (baterías) y climatización con energías renovables. Con este fin, se han establecido seis programas de ayudas que repartirán un máximo de 900 millones de euros para autoconsumo, 220 para almacenamiento energético y 200 para climatización y producción de A.C.S. con fuentes de energía renovables.
El autoconsumo como medida de ahorro
Las instalaciones de autoconsumo solar son una oportunidad para hacer frente a la subida de la luz, tanto para particulares como para empresas. Ambos perfiles de consumidores son todavía más conscientes de sus beneficios desde la última regulación del precio de la electricidad por franjas horarias. Y es que se ha visto que se trata de una medida que penaliza a los ciudadanos y a las compañías, que no pueden adaptar su consumo eléctrico a los horarios en que la luz es más barata.
Una de las principales razones para pasarse al autoconsumo solar es económica, ya que puedes generar tu propia energía. Esto es interesante a largo plazo, pero también facilita una rápida recuperación de la inversión inicial. Como el ahorro de energía es constante, recuperarás el dinero que has invertido pronto y, después, toda la energía obtenida del equipo fotovoltaico será totalmente gratuita.
Si a esto añadimos que muchas instalaciones de autoconsumo permiten verter el excedente de energía que no uses a la red y obtener una contraprestación a cambio, nos encontramos con un pequeño beneficio extra para nuestro bolsillo.
Otras ventajas del autoconsumo para empresas y viviendas particulares
Además de permitirnos ser más autónomos e independientes energéticamente y evitarnos efectos negativos de la subida de la luz actual y/o futura, las instalaciones de autoconsumo tienen otras ventajas:
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Mayor potencia
Las instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo se diseñan para cumplir los más altos estándares de eficiencia. Otra de sus ventajas es su mayor potencia: puesto que la electricidad que consumimos se genera «in situ», no debe recorrer largas distancias desde el punto de producción hasta el punto de consumo. De hecho, en el modelo de distribución eléctrica tradicional existe un porcentaje de energía que se pierde y que nos obliga a contratar más potencia para cubrir ese margen, algo que con las placas solares no ocurre.
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Mantenimiento sencillo
Las placas fotovoltaicas son fáciles de mantener. Revisando los elementos periódicamente y realizando una limpieza superficial cada seis meses, tu instalación funcionará y tendrás la certeza de que todos sus elementos están en perfectas condiciones.
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Respeto al medioambiente
Las instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo son 100% verdes y 100% respetuosas con nuestro entorno. Las placas solares no emiten dióxido de carbono ni otro tipo de sustancias contaminantes, y tampoco generan ruido. Además, su ubicación hace que la estética de los edificios se vea mínimamente afectada, convirtiéndose en un elemento más de nuestro paisaje urbano.
¿Te interesa instalar placas solares para autoconsumo en tu vivienda?
La última subida de la luz ha hecho que muchas personas se planteen apostar por el autoconsumo. Pero, ¿se trata de una fórmula adaptable a todas las viviendas? ¿Existen situaciones en las que el autoconsumo energético es menos viable?
El autoconsumo conlleva la producción de energía limpia y genera un gran ahorro en el consumo de luz mensual una vez recuperada la inversión inicial: hasta un 40-60% para instalaciones sin acumuladores, y de un 80% con acumuladores.
En España, el autoconsumo solar está regulado en el Real Decreto Ley 15/2018, que supuso una serie de cambios muy ventajosos respecto a legislaciones anteriores, tanto para la instalación de paneles solares como para favorecer el autoconsumo de todo tipo de usuarios.
Esta Ley incluye subvenciones que permiten a los ciudadanos ahorrar hasta un 50% del coste de su instalación y define las diferentes modalidades de autoconsumo (con o sin excedentes). En ella también se explican las opciones legales para instalar paneles fotovoltaicos compartidos (de forma que varios hogares o negocios puedan utilizar la misma instalación para su suministro eléctrico) o todos los trámites administrativos y/o legales para la puesta en marcha de este tipo de instalaciones.
Si tienes dudas sobre la viabilidad de este tipo de proyecto o si quieres saber el presupuesto de instalar placas fotovoltaicas en tu vivienda, contacta con nosotros.